


El estado de Florida está en máxima alerta mientras se monitorea la posible llegada de la tormenta tropical Idalia. El gobernador Ron DeSantis interrumpió su agenda para abordar la emergencia, instando a los residentes a prepararse ante la posibilidad de fuertes lluvias, vientos y tornados en la costa oeste. A medida que la tormenta gana fuerza, el estado se moviliza para enfrentar los posibles desafíos. 





